Después de una larga lucha de más de una década, tras movilizar a expertos internacionales, paralizar los trabajos de la cementera en la boca de la Cova de Eirós y acudir a los tribunales; ADEGA consigue que la Xunta acuerde declararla Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento. Además, ha abierto la exposición pública y el expediente relativo a la Cova de Eirós.
El citado expediente ha sido publicado en el DOG (Diario Oficial de Galicia). El proyecto considera la Cova de Eirós y todo su contorno como objeto de protección. Engloba un área total de 200 metros alrededor de la cueva y una zona de protección de dimensiones variables. Todo un hito a celebrar por ADEGA que continúa con la lucha por la defensa de este entorno. Ya ha presentado alegaciones al proyecto de la Xunta para efectuar mejoras, según informan ADEGA y SERMOS GALIZA.
Adela Figueroa Panisse, experta en la cueva, explica que la Cova de Eirós es un lugar excepcional para conocer más sobre nuestra historia como especie. La caverna sirve para conocer la ocupación de Galicia por los primeros seres humanos. Es la primera cueva con pinturas rupestres de Galicia, con más de 9.000 años. También es el lugar en que aparecen restos de su uso por NEANDERTALES tardíos. Esto lleva a especular con la hipótesis de haber sido un lugar en el que se reconocen restos. Son de los más antiguos habitantes humanos de Europa, además de los últimos NEANDERTALES de la especie europea Neardentalenses.
En la Cova de Eirós han podido coexistir las dos especies de seres humanos que habitaron Europa, el NEANDERTAL y el CROMAÑÓN. Como también los Hombres Anatómicamente Modernos (HAM). Sus gravados son de más edad que las pinturas. Se hallaron diversos objetos como un adorno de casi 26.000 años, un pequeño hueso de zorro y múltiples utensilios de trabajo como pequeñas hachas de cuarzo, cuarcito o de sílex, todos hallados en la galería subterránea.
Los indicios más antiguos de habitabilidad que se han encontrado en el entorno de la Cova de Eirós hasta hoy provienen de hasta 180.000 años. Hay restos de una hoguera situada en la entrada de la caverna. Hubo alguien dominando el fuego, consiguió encender allí la lumbre de un hogar. Cuando en esos tiempos no habían llegado a Europa los Hombres de CROMAÑÓN ni los HAM.
Las primeras pinturas de la historia de Galicia y gravados que acrecientan su valor
El trabajo que ADEGA ha venido realizando repetidas veces, ante la Xunta de Galicia, ha sido la solicitud del expediente de BIC para la Cova de Eirós. La primera vez fue en 2011 antes de que se hiciese pública la existencia de pinturas y gravados. Sólo se conocía el hallazgo de osos cavernarios, Ursos Spelaeus, la mayor concentración encontrada en la Europa Occidental. Existen arañazos de oseznos en las paredes del fondo de la Cova de Eirós. Además de los Restos Prehistóricos, hay restos Medievales y también del siglo XX en la que se utilizó como hórreo para guardar cereal.
En 2012, ADEGA volvió a demandar oficialmente el reconocimiento de BIC para la caverna ahora reconocida por la Ley De Patriminio. Otras asociaciones vecinales de Triacastela y O Iribio también solicitaron esta clasificación de la Cova de Eirós. También de O Petón do Lobo organización que pidió informes al Consello de Cultura Galega en este mismo sentido, el cual les apoyó, pero la Xunta no respondió.
ADEGA, ante la negativa inicial interpuso un recurso contencioso administrativo contra la Xunta por no haber cumplido la Ley De Patrimonio De Galicia y la legislación estatal. Así, el Tribunal Superior de Justicia de Galicia respondió favorablemente. Al mismo tiempo, la Consellería de Cultura también envió un informe positivo al Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
De este modo, conseguida nuestra finalidad, el alto tribunal desaconseja continuar con el litigio. Ha sido un largo camino, persistente y bien asesorado. Todo ello gracias al equipo de ADEGA, organización no gubernamental que trabaja de manera voluntaria y desinteresadamente. Y gracias también a los vecinos que han defendido la Cova de Eirós y defienden el medioambiente de Triacastela.
Fuente: ADEGA y SERMOS GALIZA