Investigadores analizaron pigmentos de cianobacterias extraídas de unas rocas del desierto del Sahara en África de hace 1.100 millones de años, los cuales tienen el color más antiguo de la Tierra.
Según una investigación llevada a cabo por un equipo internacional de expertos y recogida en la revista “Proceedings of the Natural Academy of Sciences”, científicos extrajeron pigmento de cianobacterias fósiles preservadas en rocas de 1.100 millones de años bajo el desierto del Sahara en Mauritania, África Occidental. Dichas rocas, fueran halladas hace unos diez años por una compañía minera que perforaba a cientos de metros de profundidad en ese lugar.
Dentro de las cianobacterias, los expertos analizaron sus pigmentos, compuestos por clorofila, el pigmento utilizado hoy en día por las plantas para la fotosíntesis, y descubrieron que era rosa brillante cuando fue destilado, siendo éste el color más antiguo de la Tierra de origen biológico.
Una clorofila tan antigua solo se conserva bajo circunstancias excepcionales. En primer lugar, la materia orgánica muerta (una floración de cianobacterias, por ejemplo) se hunde rápidamente en el fondo marino. Una vez allí, debe aislarse de cualquier exposición al oxígeno, lo que estimula la descomposición, y luego la roca que contiene el material debe permanecer en una sola pieza durante 1.000 millones de años, comenta Jochen Brocks, coautor del estudio.
Jochen Brocks, describió el asombro del hallazgo: “Cuando está diluido, el pigmento tiene un color rosa o rosado brillante, «un rosa neón», pero en altos grados de concentración el color puede ser desde rojo sangre a morado oscuro. En un primer momento, pensé que la muestra estaba contaminada», confesó. «Es increíble que algo con un color biológico haya sobrevivido durante tanto tiempo», agregó.
«Imagina que pudieras hallar la piel de un fósil de dinosaurio con su color original, por ejemplo, verde o azul. Éste es el tipo de descubrimiento que hemos hecho». «Estamos hablando de moléculas reales, las moléculas coloreadas más antiguas del mundo». El pigmento es 500.000 años más antiguo que otros descubiertos previamente.
Este análisis, demostró que estos fósiles de pequeñas cianobacterias fueron la base de la cadena alimenticia en los océanos, hace mil millones de años. En ese entonces, los animales no habitaban estos ecosistemas.
De acuerdo con la científica autora de la investigación, Nur Gueneli, de la Universidad Nacional Australiana, «los pigmentos rosados brillante son fósiles moleculares de la clorofila que fue producida por un antiguo organismo fotosintético que vivía en un antiguo océano que desapareció hace mucho tiempo».
“Este remanente color, sugiere que los antiguos organismos que absorbían la luz del sol arrojaban un tinte rosado a un océano desaparecido”, aclara Nur Gueneli.
El profesor Jochen Brocks, explicó que los organismos más grandes aparecen de manera más tardía debido al tamaño limitado de sus alimentos. Un ejemplo de ello, es la aparición de las algas, que, aunque son microscópicas, superan en tamaño (mil veces más) a las las cianobacterias.
«Los océanos de cianobacterias comenzaron a desaparecer hace unos 650 millones de años, cuando las algas comenzaron a proveer la energía necesaria para la evolución de ecosistemas complejos. Estos ecosistemas, permitieron que animales más grandes, incluyendo los seres humanos, llegaran a sobrevivir en la Tierra».
Fuentes: BBC News y Muy Interesante
