Los globos solares son una nueva alternativa más económica de conseguir energía del sol y que pueden generar 400 veces la energía de un panel solar tradicional, diseñados y fabricados por Rob Lamkin y Cool Earth Solar en Livermore, California (Estados Unidos). Al igual que otros paneles solares, estos globos solares gigantes recogen los rayos del sol concentrados y los convierten en electricidad.
Con un coste mínimo de mantenimiento y reemplazo y una instalación sostenible con el medio ambiente, los globos solares de Cool Earth Solar, pretenden reducir significativamente el coste de la energía solar. Usando células solares fotovoltaicas tradicionales, pero adheridas al contenedor con forma de globo, esta empresa junto a Rob Lamkin, desarrolló un producto mucho más eficiente y liviano, además de económico.
El uso de una película delgada, ligera y flexible de células fotovoltaicas, en un globo inflado de 2 metros de diámetro y colgado mirando hacia el cielo, hace que estos globos solares sean más eficientes que los paneles estándar, generando unos 500W de electricidad cada uno.
El funcionamiento de estos nuevos globos solares es bastante simple. Los captadores inflables captan la luz solar a cierta altitud y la concentran en celdas fotovoltaicas, incrementando varias veces la cantidad de energía que impacta sobre las celdas del globo. Para ello, se izan los concentradores hasta una altura determinada para optimizar la captación de luz solar, quedando los globos suspendidos y estabilizados en el aire mediante cables conectados a un soporte fijado en tierra. Estos cables, además de sujetar los globos, también permiten transmitir la energía generada a tierra para su almacenamiento.
Asimismo, el diseño curvo convexo de los globos solares, con la mitad inferior cubierta de células solares y la parte superior medio transparente, permite captar la luz desde varias direcciones al mismo tiempo, por eso no necesitan que la luz del sol directo y pueden sacar mucho más provecho.
Una de las ventajas más importantes de los globos solares de Cool Earth, es que al estar suspendidos en el aire, se pueden instalar en cualquier ubicación por remota que sea con un impacto ambiental limitado y sin necesidad de destinar grandes superficies de suelo a estas instalaciones. Al quedar con la mitad superior mirando hacia el cielo y, la inferior, cubierta de células solares, aumentan considerablemente la capacidad de almacenamiento de energía. Además, es una infraestructura mucho más barata que las tradicionales ya que limita el uso de silicio.
Y gracias a su diseño aerodinámico, pueden resistir vientos de 100 m.p.h, y su carcasa exterior plástica protege el receptor y la superficie de los espejos de concentración de las inclemencias meteorológicas, como la lluvia, la acción directa de insectos o la suciedad.
Según los creadores de Cool Earth Solar, cada globo solar puede generar hasta 500 watts de electricidad con un coste eventual de menos de 2 dólares. Con los bajos costes de mantenimiento y reemplazo de cada globo solar en comparación con la electricidad generada, el sistema podría situar los costes de implantación de la energía solar a niveles óptimos, llegando incluso a competir directamente con las fuentes de energía basadas en combustibles fósiles como el petróleo.
Por último, cabe indicar que ya hay en funcionamiento algunas instalaciones a gran escala para probar sobre el terreno esta nueva tecnología de globos solares.
Fuente principal: Blogthinkbig.com