Los pistachos son unos frutos secos verdosos cubiertos con una cáscara y que solemos comer con sal y tostados o incluidos en algunas recetas; pero seguramente desconozcas o te preguntes de dónde salen los pistachos, para qué sirven los pistachos, o cuáles son las propiedades de los pistachos. Aquí mismo te explicamos todo eso, así como también cómo plantar pistachos en casa y cómo obtener tu propia plantacion de pistachos naturales. Si te gustan estos frutos secos, sigue leyendo y no te pierdas nada sobre ellos.
¿Qué son los pistachos?
En realidad, los pistachos son las semillas del fruto del alfóncigo, alfónsigo o pistachero (Pistacia Vera, L.), los cuales son los nombres que reciben los pistachos árbol o pistachos plantas, de donde salen los pistachos naturales que después nos comemos. Éste es un árbol pequeño originario de oriente medio, que comenzó a cultivarse en las zonas más secas de Irán, Turkmenistán, Turquía y Afganistán. Hoy en día, Irán es el principal productor de pistachos del mundo, seguido por Estados Unidos, aunque el pistacho árbol se ha extendido a muchos otros países, incluido España.
El pistacho árbol o alfóncigo, es una planta desértica que tiene una alta tolerancia al suelo salino y se suele cultivar en zonas con mucho calor y baja humedad. No obstante, soporta temperaturas desde -10ºC hasta 40ºC, necesita estar orientado hacia el sol y en suelos bien drenados. Se trata de una planta dioica, es decir, hay pistachos macho y pistachos hembra, crece hasta 10 metros de altura, sus flores carecen de pétalos y requiere de largos veranos para la adecuada maduración de los frutos. Dicho fruto, consiste en una drupa con una semilla (el pistacho) cubierta por una piel carnosa y fina de color verde, una cáscara dura blanquecina y una piel fina de tono malva. Al madurar, la piel verde externa se vuelve amarilla-rojiza, y la cáscara blanquecina del pistacho se abre parcialmente, de manera abrupta y emitiendo un sonido audible. A este rompimiento, se le conoce como dehiscencia/eclosión y es una característica que ha sido seleccionada por los humanos, para diferenciar los distintos cultivares comerciales. Cada alfóncigo da, en promedio, unos 50kg de pistachos cada dos años.
Pistachos propiedades y beneficios del pistacho para el hombre
Entre la larga lista de propiedades de los pistachos, la Fundación Española de la Nutrición (FEN), destaca las siguientes:
- Alto contenido en grasas insaturadas (grasas buenas).
- Gran aporte de hidratos de carbono.
- Buena fuente de proteínas vegetales.
- Elevado poder antioxidante.
- Abundante contenido de vitaminas B6 y E, tiamina y ácido fólico.
- Muy ricos en selenio, magnesio, hierro, zinc, potasio, fósforo, cobre y calcio.
- Son unos de los frutos secos con más fibra.
Vistas las buenísimas propiedades del pistacho, no es de extrañar que cada vez sean más los estudios que demuestran los beneficios de los pistachos para la salud. Veamos con más detalle para qué son buenos los pistachos:
- Pistachos y colesterol: lo mantienen bajo control y mejoran la salud cardíaca, gracias a su alto contenido en grasas insaturadas y fitoesteroles, si se consume, al menos, 0,8 gramos.
- Ayudan a controlar el peso: con respecto a la pregunta de si los pistachos engordan, la respuesta es un no rotundo. Aunque tengan hidratos de carbono, el resto de propiedades ayudan incluso a adelgazar si se incluyen en una dieta equilibrada. Los pistachos son ricos en fibra y proteínas, que aumentan la sensación de saciedad, ayudando a sentirte más lleno comiendo menos.
- Pistachos calorías vs proteínas: Los pistachos están entre los frutos secos menos calóricos, mientras que el 20% de su peso son proteínas, por lo que una ración de 30 gramos de pistachos, proporciona más del 11% de la dosis recomendada de proteína, y también el 10% de la de fibra para adultos. Con esto, los pistachos son unos frutos secos muy nutritivos.
- Ayudan a controlar el azúcar en sangre: aunque son altos en hidratos de carbono, los pistachos tienen un bajo índice glucémico, lo que significa que no causan un pico acentuado en los niveles de glucosa después de comerlos, y de hecho, pueden ayudar a controlar el azúcar de la sangre, gracias en parte a su aporte de vitamina B6. Así, la inclusión de 57 gramos de pistachos en la dieta diaria puede ayudar a la diabetes tipo II, reduciendo significativamente los niveles de glucosa y beneficiando la alteración de resistencia a la insulina.
- Son ricos en antioxidantes: sólo por detrás de las nueces, los pistachos son los frutos secos que más antioxidantes contienen. En concreto, son los más ricos en luteína y zeaxantina, antioxidantes especialmente involucrados en la salud de nuestros ojos. Además, los antioxidantes presentes en los pistachos son fáciles de absorber en la digestión.
- Mejoran los aparatos reproductivos: en el caso de los varones, los pistachos mejoran la fertilidad. Gracias a las grasas insaturadas y al selenio, favorecen la función eréctil y la espermatogénesis. Y en las mujeres, alivian los dolores menstruales.
- Reducen el estrés y la anemia: su alto contenido en fósforo y hierro favorece la buena salud de nuestros huesos, reduce los niveles de estrés y de anemia, y nos ayuda a mantenernos más enérgicos. Igual de importante es su elevado contenido en potasio, fundamental para el buen rendimiento de los músculos durante la actividad deportiva.
En cuanto a cómo se comen los pistachos y a cuántos pistachos comer al día, lo más ideal sería tomar unos 50-60 pistachos naturales o pistachos ecológicos sin sal, que puedes comprar a buenos precios, tanto en tiendas físicas como por Internet. Asimismo, en vez de comer directamente los pistachos, puedes integrarlos en otras recetas de cocina, como helados, tartas, salsas, etc., que seguro disfrutarás tanto elaborándolas como degustándolas.
Cómo plantar pistachos naturales en España
Una vez visto todas las propiedades y beneficios de los pistachos para nuestra salud, seguro que además de comprarlos y consumirlos, te entran ganas de cultivarlos tú mismo. Por eso, a continuación, te hablaremos sobre cómo plantar pistachos árbol en terrenos de cultivo en nuestro país, así cómo hacer germinar y crecer tus pistachos planta en casa.
En todos los casos, debes tener en cuenta el suelo y clima donde plantar los pistachos, cómo plantar pistachos machos y hembras y las posibles plagas que afectan a estos árboles.
Con respecto al suelo y al clima, decir que las características de estos factores, determinarán el tiempo que tarde el pistachero en dar frutos. Muchas de las zonas de cultivo de España se adaptan al pistacho, el cual soporta bien la sequía. No obstante, en caso de disponer de agua en nuestra finca, alcanzaremos mejores producciones, aunque hay que tener mucho cuidado con los encharcamientos. La precipitación óptima para este cultivo, es entre 500 y 600mm anuales, aunque se puede hacer el cultivo del pistacho en secano, pero con rendimientos inferiores.
La zona óptima para la siembra del pistacho árbol, está entre los 30 y 45º N de latitud, es decir, en una pequeña zona del mundo que engloba los países mediterráneos, el Oriente Próximo, China y el sur de Estados Unidos. En España, el alfóncigo se puede plantar al sur de una línea imaginaria que va desde Manresa a Barcelona, y de ahí a Zamora y Oporto; siempre en un área fuera de la influencia del mar con más de 700 horas de frío.
En cuanto a cuándo plantar pistachos, al tratarse de un árbol frutal, es recomendable plantarlo en los meses de invierno, o sembrar los pistachos a finales del mes de marzo, en caso de que se usen semillas. Asimismo, si queremos obtener una producción de pistachos considerable, es importante fijarnos y plantar pistachos hembra y pistachos macho. Éstos últimos no producen fruto, pero son necesarios para que las variedades hembra lo tengan. Además, podemos encontrar multitud de variedades de pistacho para plantar, pudiendo escoger una u otra en función de nuestra zona climática.
Y con respecto a las plagas y enfermedades, el pistachero es vulnerable a insectos picadores como los homópteros pulgones, hongos como la alternaria, y pájaros que vienen a picotear sus frutos.
Plantar pistachos árbol en cultivos o grandes extensiones de terreno
Aunque el cultivo del pistacho es minoritario en España, en los últimos diez años la plantación de pistachos ha aumentado de forma importante, debido a su alta rentabilidad. Actualmente nuestro país es importador de pistachos, por eso, las grandes empresas comercializadoras de frutos secos, están muy interesadas en potenciar este cultivo. Además, con los nuevos regadíos se pueden conseguir muy buenas producciones: de media, el rendimiento de este cultivo es de 2.000 kg/ha a partir del octavo año y hasta el final de su vida productiva, mientras que el precio de venta medio de los últimos 10 años es de 4,6 €/kg.
Asimismo, el pistacho puede convivir con otras especies de árboles, ya que vegeta muy bien en plantaciones de cultivos leñosos, como olivo, viña y almendro, así como su poda también resulta similar a la de estas otras especies. En general, los cultivos leñosos resultan más rentables para los agricultores que los cultivos herbáceos, por lo que si tienes la posibilidad (después de hacer un estudio técnico y económico), puedes plantearte incorporarlos a tu terreno.
De nuevo, antes de implantar el cultivo del pistacho en tu explotación agrícola, deberías tener en cuenta:
- Plantar variedades macho y hembra de pistacho: hay una amplia gama de variedades tradicionales de pistachero donde elegir. Además, también hay nuevas variedades desarrolladas en los últimos años con mucho potencial. Para una correcta polinización se tiene que plantar un macho para cada 10 hembras.
- La variedad del patrón: en general, los pistacheros son árboles que, como la mayoría de frutales, se plantan injertados. De esta forma, la variedad patrón o portainjerto, se selecciona según el suelo, mientras que la variedad injertada solo se selecciona con criterios de producción.
- El marco de plantación: el más usual es de 6–7 metros entre filas y 5 metros entre árboles, aunque este se tiene que adaptar según las condiciones.
- Presentación de la planta: los pistachos se pueden plantar en cepellón o a raíz desnuda. Según la época del año en la que se quiera plantar, la elección variará. El cepellón se puede plantar en cualquier época del año, mientras que los árboles a raíz desnuda, solo se pueden plantar durante el invierno.
- Injerto: tanto se pueden comprar pistachos al por mayor ya injertados en vivero, como realizar el injerto en campo. La primera opción es más cómoda pero también más cara. La segunda, requiere plantar primero el patrón y más tarde pasar a injertar todos los árboles. La variedad debe injertarse sobre un patrón u otro dependiendo del suelo y del agua que vayamos a aportar al cultivo, dependiendo de si tenemos regadío o si queremos realizar el cultivo del pistacho en secano.
- Variedades de pistacho: existen varias variedades aptas para el cultivo de plantaciones intensivas en pistachos. Algunas de las variedades de pistachos plantadas en España son Kerman, Sirora, Larnaka, Golden-Hills, LOst-Hills, Mateur y Aegina.
A la hora de comprar pistachos árbol, podemos optar por comprar pistachos ya injertados en vivero, realizar luego nosotros el injerto, o comprar semillas de pistachos. Si se compran por Internet, hay que tener en cuenta que los envíos de pistachos al por mayor empacados, tienden al autocalentamiento y a la combustión espontánea a causa de su elevado contenido de grasas y su bajo contenido de agua.
En cuanto al terreno, éste debe ser llano, con espacios abiertos para la circulación de aire, un suelo arenoso o francoarenoso, pH entre 6 y 8, y preferentemente con orientación sur. Para su preparación, unos meses antes de realizar la plantación de pistachos, se le dará un pase cruzado de “topo” o “subsolado”, con el fin de romper la posible resistencia del suelo al posterior despliegue radicular, y posteriormente una pasada con cultivador para dejar el terreno fino. Unos días antes de la plantación, se puede realizar el “marqueo” dando un pase de vertedera sobre la línea donde se colocarán los árboles.
Cuando se plantan los pistachos, éstos deberían tener dos años de vida. En el momento de la plantación de los pistachos, sólo tendremos que ir quitando las señales, dar un golpe de azada, extraer la planta de pistacho y colocarlo en el hoyo. La profundidad de la colocación debe ser aproximadamente la misma que trae el árbol en el recipiente original. Posteriormente, se tapa el hoyo y se da un riego para asentar la tierra. No será necesario el abonado hasta más adelante, hasta que los árboles adquieran una edad de entre 5 o 7 años.
Es importante que justo después de plantar, los árboles se tutoren y se protejan con una malla. De esa forma, se asegura un crecimiento correcto. El tutor puede ser de hierro, acero galvanizado, madera tratada, etc., pero debe aguantar más de 5 años su estructura, sosteniendo así la planta con garantía.
Una vez plantados los pistachos, se entra en una rutina de cultivo muy semejante, por no decir igual, a la del almendro y el olivo. Se labran las tierras con una labor profunda en noviembre, otra labor de primavera y un pase superficial de cultivador en junio, para quitar hierbas. Sin embargo, una labor peculiar del pistacho, es el subsolado por el centro de las calles, a mediados de septiembre, una vez recogido el fruto. Es un pase de subsolador de tres púas a unos 40 centímetros de profundidad, para hacer penetrar el aire y el agua directamente al subsuelo, durante el otoño.
Las técnicas de no laboreo son habituales en zonas donde hay un riego realmente abundante: > 20.000 litros árbol, si no se dispone de este caudal de riego, se deben aplicar las labores tradicionales de cultivo del suelo.
Las necesidades hídricas del pistachero, oscilan entre 300 y 600mm, según la variedad. En general, en zonas áridas estas necesidades se cubren con dotaciones de riego de entre 4.000 y 6.500 m3/ha. El riego localizado es perfecto para el cultivo del pistacho, ya que se evitan los encharcamientos. Durante el verano, se puede regar cada 10 días con suficiente agua. Para conseguir mucha producción y de calidad, es interesante dividir el riego en tres fases:
- Fase I – Desde la floración hasta el máximo tamaño del fruto: en esta fase se tiene que cubrir la totalidad de sus necesidades hídricas.
- Fase II – Endurecimiento de la cáscara: para conseguir un buen endurecimiento es importante establecer restricciones en el riego. El óptimo es aportar solo la mitad de las necesidades.
- Fase III – Desde maduración del fruto hasta recolección: en esta fase, como en la primera, se tienen que cubrir el 100% de necesidades hídricas del cultivo.
Los árboles de pistacho necesitan de siete a diez años para lograr una producción considerable, la cual es alterna o bienal, es decir, la cosecha es más abundante cada dos años. La producción pico se alcanza aproximadamente a los 20 años. Por lo general, a los árboles se les poda hasta un tamaño que permita realizar la cosecha con mayor facilidad. Según la edad de los pistacheros el tipo de poda a realizar varía:
- Poda de formación: es la que se realiza los primeros 5–8 años, en los que el cultivo no es plenamente productivo. El objetivo, es conseguir que el árbol adquiera la forma deseada. La idónea es en forma de vaso, con tres ramas principales y altura de cruz no superior al metro. Con esa forma, se consiguen mejores rendimientos y la recolección es más fácil.
- Poda de producción: esta es la poda que se realiza todos los años productivos en invierno. El objetivo de esta poda, es conseguir aireación y luminosidad en el interior del vaso. De esta manera, se consigue mantener la producción.
En cuanto a la recolección y proceso del pistacho, los árboles de este cultivo empiezan a dar sus primeros frutos a los tres o cuatro años de plantación. Entre finales de agosto y principios de septiembre, según la zona, es el momento de recolectar el pistacho. Sabrás el momento justo de cosechar el fruto del pistacho, cuando este muestre una coloración opaca y que la cáscara se separe ligeramente de la piel, no antes ni después de esto. La recolección se hace con un vibrador con paraguas, como en el olivo.
Una vez este está recogido, se tiene que procesar, ya que se comercializa pelado y seco. Para ello, se emplea un tractor con carreta y alzas, máquinas peladoras (con gomas blancas macizas y toma de agua), un secador o una superficie de cemento para el secado, y una máquina clasificadora por aire. Una vez el fruto se ha secado (por debajo del 7% de humedad), el pistacho se puede ensacar y almacenar, pero antes hay que retirar los frutos vacíos o vanos.
Es importante señalar que las fincas pequeñas requieren necesariamente acceso a máquina vibradora (tipo olivo), peladora, y secado al sol, como mínimo. Hay que vibrar + pelar + secar, sin interrupción. De lo contrario, aparecen las aflotoxinas y se pierde la cosecha. Así como no le conviene al agricultor tener la cosecha almacenada en su casa, como puede ser en el caso de las almendras. El precio del pistacho es estable y se corre el riesgo de infecciones de aflotoxinas y “Palomitas-polillas”, que pueden destruir toda la cosecha en unos días.
Cómo plantar pistachos en casa
Por otro lado, si ya te dedicas a la agricultura urbana y te gustaría plantar pistachos para cultivarlos y después comerlos, tienes dos opciones para hacerlo: comprar un pistacho en maceta injertado y trasplantarlo, o comprar semillas de pistacho, hacerlas germinar tú mismo y luego trasplantar el árbol; según tus necesidades de espacio y de tiempo disponibles.
En el primer caso, debes recordar que, si quieres obtener frutos, debes plantar un pistacho macho y otro hembra, por lo menos. Al plantar pistachos en casa, no deberás regarlos en exceso, lo recomendable es hacerlo poco a poco, de forma espaciada y eligiendo una zona del jardín donde puedan recibir suficientes rayos solares.
Y en el caso preferir germinar semillas de pistacho en casa, debes seguir los siguientes pasos:
- Prepara un cuenco con agua a temperatura ambiente para dejar en remojo las semillas unas 48 horas antes de sembrarlas.
- Después, envuelve los frutos en una toalla pequeña y guárdala en el refrigerador durante, al menos, 45 días.
- Una vez hecho esto, coloca la toalla con las semillas en una zona oscura de la casa, pero a una temperatura entre 20 y 30ºC, y déjalas ahí un par de días.
- A continuación, siembra las semillas en una maceta de al menos 15 centímetros, con tierra y un buen drenaje. Para ello, coloca la semilla a una profundidad de 2 a 5cm., y cúbrela de tierra. Coloca la maceta en un lugar bien iluminado.
- Una vez que los brotes hayan empezado a crecer, deberás trasplantarlos a un terreno, el cual debes tener listo De preferencia, haz el trasplante durante el invierno.
- Para la plantación de pistachos, introduce los brotes en el suelo. Forma un montículo de 5cm de altura y coloca cada brote en el centro, empujándolos hasta 3cm de profundidad. Los montículos evitarán que el agua se acumule cerca de las raíces de la planta conforme va creciendo.
- Identifica el sexo de tu pistacho: las plantas macho florecen primero, tienen tallos largos con varias flores. En cambio, las plantas hembra, presentan flores más grandes y cercanas al tronco. Para que produzcan frutos, solo necesitarás una planta macho por cada diez hembras. Así que, el resto de pistachos macho deberás quitarlos.
- Realiza los cuidados de mantenimiento y poda descritos para el caso de la plantación de pistachos en grandes extensiones.
- El hecho de que tengas un árbol fuerte y sano, no garantiza que vaya a dar frutos. Para asegurarte de que lo haga, puedes considerar realizar un injerto. Para ello, deberás colocar el esqueje de un árbol que si da fruto en el tronco de tu árbol para que se fusionen y se conviertan en una sola planta.
Finalmente, esperamos que os haya gustado este artículo sobre los pistachos y su plantación y que os haya resultado interesante o entretenido.
Fuentes: Wikipedia, vitónica, Agroptima Blog y Twenergy
