Debido a la construcción de infraestructuras y la obtención de recursos por parte del ser humano, se han destruido ecosistemas enteros, con su consiguiente pérdida de biodiversidad. Como resultado, muchos ecosistemas ya no son capaces de realizar tareas importantes como la regulación de inundaciones. Por ello, durante varias décadas se han llevado a cabo proyectos con el objetivo de reconstruir los ecosistemas con métodos como el rewilding, renaturalización o resilvestración de los espacios, que aquí os comentamos.
Qué quiere decir Rewilding y cuál es su objetivo
El término Rewilding nació por parte de activistas de la conservación hace años, pero su significado se ha ido ampliando y modelando. Fue acuñado en 1992 por el ambientalista estadounidense Dave Foreman, para quien este término significa la recuperación de la vida silvestre, salvaje, según puede leerse en la web de The Rewilding Institute, del que es fundador. El término apareció impreso por primera vez en 1990 y fue refinado por los biólogos de conservación Michael Soulé y Reed Noss en un artículo publicado en 1998. Sin embargo, el concepto no tuvo demasiada repercusión, al menos fuera del ámbito científico, hasta que el divulgador y naturalista británico David Attenborough lanzó un enérgico “¡We need to rewild the world!” en su documental Una vida en nuestro planeta, refiriéndose a la restauración de procesos ecológicos y a la reintroducción de organismos salvajes en entornos en los que han desaparecido o están en peligro de extinción debido a la acción del hombre.
Según Soulé y Noss, el Rewilding es un método de conservación basado en «núcleos, corredores, y carnívoros», el cual parte de la idea del paradigma de las tres Cs: grandes áreas centrales, conectadas por corredores para permitir el movimiento de los carnívoros”, estando ligado a la conservación de los grandes carnívoros en espacios extensos.
Actualmente, el Rewilding es una estrategia de restauración ecológica a gran escala que tiene como objetivo recuperar o restaurar ecosistemas completos y funcionales, para devolverlos a un estado cercano al original (previo a la intervención humana o antropización); así como proteger los procesos naturales y los núcleos silvestres, proporcionando conectividad entre las diversas zonas que conforman los espacios, protegiendo o reintroduciendo grandes depredadores y especies claves para aumentar la biodiversidad y alcanzar la autorregulación de los ecosistemas. Para ello, el Rewilding da un paso más e incluye también el desarrollo rural y la reconexión de las personas con la naturaleza y la vida silvestre, entre sus objetivos, para así convertir estos sitios en impulsores de desarrollo económico, a la vez que se respeta el mundo silvestre. No obstante, cabe indicar que el Rewilding se suele centrar más en la restauración de procesos que en recuperar el ambiente original, ya que esto es muy difícil de conseguir; así, la meta, en la mayor parte de las ocasiones, debe ser mejorar la integridad ecológica hasta donde sea posible y alcanzar un paisaje multifuncional.
Asimismo, el énfasis actual va más allá de la restauración de procesos críticos que gobiernan las especies que son reintroducidas. Se considera el ecosistema como un todo que, con acciones estratégicas de restauración basadas en el manejo de la conectividad, las perturbaciones naturales y las redes tróficas, se le ayuda a recuperarse por sí mismo y mantenerse con poco esfuerzo adicional, con consecuencias positivas para los humanos y para los ecosistemas.
Cabe señalar que los ecosistemas completos son aquellos que tienen presentes a todas las especies que le son propias, es decir, las especies que los habitaron en tiempos históricos. Pero las especies no sólo tienen que estar presentes, sino que tienen que estarlo en un número suficiente para poder cumplir con sus roles ecológicos, para que impacten en el ecosistema, esos son los ecosistemas funcionales.
Así pues, el Rewilding fomenta soluciones basadas en la naturaleza para problemas como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad o el abandono rural. A través del rewilding, los ritmos naturales de la vida silvestre crean hábitats más salvajes y con mayor biodiversidad. Para ello, engloba distintas estrategias como la reintroducción de especies o la promoción de un turismo que ayude a la conservación.
En cuanto a cómo se elige el ecosistema a recuperar, en primer lugar, este debe de ser un lugar importante por su biodiversidad. A cualquier escala, requiere primero identificar áreas centrales silvestres (o casi silvestres o potencialmente silvestres), determinar qué hábitats y qué especies están presentes, y evaluar la salud general del ecosistema. Más difícil es determinar si hay contaminantes o venenos presentes, o si alguna especie ha sido extirpada, y si existen corredores de vida silvestre habitables que se conecten con otros núcleos.
En resumen, lo que hace el Rewilding es:
Dejar que la naturaleza siga sus propios caminos:
La naturaleza sabe más cuando se trata de supervivencia y autogobierno. Podemos ayudarle creando las condiciones adecuadas: eliminando diques y presas para liberar ríos, reduciendo la gestión activa de las poblaciones de vida silvestre, permitiendo la regeneración natural de los bosques y reintroduciendo especies que han desaparecido como resultado de las acciones del hombre. Pero deberíamos dar un paso atrás y dejar que la naturaleza se maneje sola.
Desde el libre movimiento de los ríos hasta el pastoreo natural, la sucesión de hábitats y la depredación, el Rewinding permite que los procesos naturales restaurados den forma a nuestros paisajes marinos y paisajísticos de manera dinámica. No existe un punto o estado final óptimo definido por el ser humano. Va donde la naturaleza lo lleva. Al ayudar a que los poderes curativos inherentes de la naturaleza ganen fuerza, veremos que la gente intervendrá menos en la naturaleza en el futuro.
Recuperar la vida silvestre:
Las especies de vida silvestre europeas han disminuido considerablemente. Algunas de ellas incluso se han extinguido, aunque desempeñan un papel ecológico de importancia crítica. El Rewilding trabaja para restaurar los gremios de especies perdidas dándoles espacio para prosperar, mejorando la población y reintroduciendo especies nativas clave.
Trabajar a escala de la naturaleza:
Rewilding significa trabajar a escala para reconstruir la diversidad y abundancia de la vida silvestre y brindar a los procesos naturales la oportunidad de mejorar la resiliencia de los ecosistemas, con espacio suficiente para permitir que la naturaleza impulse los cambios y dé forma a los sistemas vivos.
Actuar en contexto:
El Rewinding abarca el papel de las personas y sus conexiones culturales y económicas con la tierra. Se trata de encontrar formas de trabajar y vivir dentro de ecosistemas vibrantes, naturales y saludables, y de reconectarnos con la naturaleza salvaje.
Garantizar el bienestar:
Cuando la naturaleza está sana, nosotros también lo estamos. Dependemos del mundo natural para obtener agua, alimentos y aire. Cada vez somos más conscientes de que conectar con la naturaleza salvaje nos hace sentir bien y nos mantiene bien mental y físicamente. En este sentido, el Rewilding consiste en reconectar una sociedad moderna (tanto rural como urbana) con una naturaleza más salvaje.
Entregar para el futuro:
El objetivo es apoyar los procesos impulsados por la naturaleza, que, a su vez, generarán una naturaleza más salvaje. Esto requiere tiempo y espacio. El Rewilding se trata de ascender en una escala de lo salvaje, donde cada paso que se avanza se considera un progreso. Si creamos y protegemos áreas donde se pueda llevar a cabo el Rewilding, tanto las personas como la vida silvestre se beneficiarán a largo plazo.
Ofrecer soluciones naturales:
Al proporcionar y mejorar soluciones basadas en la naturaleza, el Rewilding puede ayudar a mitigar los desafíos ambientales, sociales, económicos y climatológicos.
Conservación complementaria:
El Rewilding complementa métodos más establecidos de conservación de la naturaleza. Además de conservar los hábitats restantes más intactos y las áreas clave de biodiversidad, debemos ampliar la recuperación de la naturaleza restaurando las interacciones perdidas y restaurando la conectividad de los hábitats.
Trabajar juntos e intercambiar conocimiento:
Construir coaliciones y brindar apoyo basado en el respeto, la confianza y los valores compartidos. Conectar a personas de todos los orígenes para crear formas innovadoras de reconstrucción y ofrecer los mejores resultados para las comunidades y la naturaleza salvaje.
Y también intercambiar conocimientos y experiencia para perfeccionar continuamente las mejores prácticas de rewilding y lograr los mejores resultados posibles. Utilizar la mejor evidencia disponible, recopilar y compartir datos y tener la confianza para aprender del fracaso conducirá al éxito.
Por otro lado, es importante señalar que el término Rewilding tiene connotaciones diferentes según el área geográfica donde nos situemos. Por ejemplo, en Sudamérica se entiende como sinónimo de reintroducción de especies; en EE.UU. tiene que ver con la recuperación de grandes corredores ecológicos; en Europa, con la restauración de procesos ecológicos; mientras que África es, el gran ejemplo mundial de cómo el turismo puede ayudar a la conservación y mejora de los espacios en los que basa su actividad.
Por otra parte, además de Rewilding también tenemos los términos de Renaturalización y Resilvestración, que se suelen utilizar como sinónimos, aunque, en realidad, presentan ciertos matices diferenciadores. Así pues, la renaturalización se enfoca en la restauración de un área específica para mejorar su calidad ambiental, mientras que el rewilding se centra en la recuperación de procesos ecológicos y especies en una escala más amplia, con el objetivo de restaurar un ecosistema completo y auto-regulado. En general, la renaturalización es un aspecto del rewilding, pero este va más allá de la simple restauración de un hábitat para incluir la recuperación de los procesos ecológicos y la biodiversidad.
Y por su parte, la resilvestración es un aspecto de la renaturalización que se enfoca en la restauración y la gestión de los bosques, con un enfoque en la resiliencia y la sostenibilidad a largo plazo.
Beneficios del rewilding, renaturalización y resilvestración
A continuación, os indicamos algunos de los beneficios que se obtienen al llevar a cabo técnicas de rewilding, renaturalización y resilvestración:
- No es solo beneficioso para la vida silvestre, sino también para las personas. En el ámbito de los beneficios no materiales, distintos estudios muestran que, por ejemplo, pasear por zonas naturales más ricas y diversas tiene efectos positivos sobre el bienestar.
- Nuevas oportunidades económicas. El disfrute de la naturaleza ofrece oportunidades económicas para la gente del lugar, así lo demuestran los diferentes proyectos que se están emprendiendo en toda Europa alrededor del turismo de naturaleza.
- Aumenta la captura y almacenamiento de carbono atmosférico por parte de los ecosistemas, lo que ayuda a atenuar el cambio climático.
- Se reducen los gases de efecto invernadero. Al restaurar a los grandes herbívoros, se pueden reducir los niveles de gases de efecto invernadero. Los herbívoros también pueden reducir la frecuencia de los incendios al comer maleza inflamable, lo que, a su vez, reduciría las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Aumento de la productividad. El ramoneo y el pastoreo también aceleran el ciclo de nutrientes, lo que puede aumentar la productividad de las plantas locales y mantener la productividad del ecosistema específicamente.
- Aumento de la superficie de bosques. El abandono de los cultivos y pastos permite la regeneración natural de los matorrales y los bosques. En el mundo, con un 40 % de la superficie terrestre cultivada o pastada de forma permanente por herbívoros domésticos, ha habido un notable incremento de la superficie ocupada por los bosques boreales y templados durante las últimas décadas, explicada sobre todo por la regeneración natural.
- Recolonización de fauna. La recuperación de la cubierta vegetal viene acompañada por la recolonización de la fauna. Así, en Europa han aumentado las poblaciones de grandes carnívoros como el oso pardo, el lobo, el lince boreal y el glotón. También han aumentado las poblaciones de herbívoros grandes y medianos como el ciervo, el jabalí, el corzo y la cabra montés.
Proyectos de Rewilding en el mundo
Por último, os hablamos de algunas organizaciones nacionales e internacionales que se dedican al rewilding y de sus proyectos.
Rewilding Europe
Rewilding Europe es un equipo internacional de científicos con participación española que utiliza el rewilding para dar paso a la renaturalización de los ecosistemas en su conjunto. Trabajan a escala europea en varios proyectos.
Según comenta el español Néstor Fernández, investigador de la MLU y el iDiv, el grupo está desarrollando proyectos como “un nuevo sistema para identificar zonas prioritarias para el ‘rewilding’ como base de información para las políticas europeas de conservación de la biodiversidad”.
Para los autores, lo más importante es analizar el ecosistema en su conjunto, examinar sus funciones, distinguir las perturbaciones en el sistema y derivar una serie de medidas para restaurar los procesos que han sido interrumpidos.
Los investigadores presentan un plan de acción para desarrollar proyectos de recuperación de la vida silvestre. Sobre todo, intentan dejar una cosa clara: no existe un ecosistema ideal que pueda crearse a través de medidas específicas. “Aunque haya que tomar alguna medida, debemos tratar de intervenir lo mínimo a largo plazo”.
Además, sostienen que es fundamental tener en cuenta las posibilidades geográficas y sociales. “Estos proyectos siempre deben involucrar a la población local, de lo contrario, no tendrán éxito. Siempre hay que llegar a un compromiso entre lo que es teóricamente posible y lo que es realmente viable. Los ecosistemas son dinámicos y, por lo tanto, las medidas también deben serlo”.
Actualmente están trabajando en espacios como el delta del Danubio (Rumanía) y el delta del Oder, un área situada en la laguna de Sczecim, a lo largo de la costa báltica entre Polonia y Alemania.
“El delta del Oder es un buen ejemplo de cómo la restauración puede crear beneficios tanto ambientales como sociales. Esta zona es importante por ser una región clave para aves migratorias y otras especies y un ejemplo magnífico de cómo el abandono de las zonas agrícolas proporciona una gran oportunidad para recuperar sistemas de gran valor ecológico y con importantes beneficios para las personas”, comenta Fernández.
EL delta del Oder se había degradado como consecuencia de su la actividad ganadera y agrícola. Ahora, muchos animales viven en este espacio natural, incluyendo águilas de cola blanca, bisontes y castores. Esta recuperación ha permitido el desarrollo de una industria turística como excursiones, deportes y otras actividades alrededor de la naturaleza de la zona.
Rewilding Spain
A nivel nacional, en España, Rewilding Europe opera como Rewilding Spain, constituida el 10 de marzo de 2020 como la Fundación Española de Renaturalización, con el fin principal de promover la recuperación de la naturaleza y la fauna salvaje en España, así como la conservación de la naturaleza y el paisaje, sobre la base de los procesos naturales y en beneficio de la sociedad.
Para alcanzar este fin, se ha constituido un Patronato con experiencia en nuestro marco geográfico, y se está desarrollando un programa de trabajo adaptado a la situación de la conservación y el medio rural en España.
Rewilding Spain trabaja en varios proyectos, como las dehesas (bosques de encinas) del oeste peninsular y la región del Sistema Ibérico Sur o “Iberian Highlands”, donde buscan aprovechar la despoblación rural para impulsar diversos proyectos piloto para renaturalizar el lugar.
Uno de ellos contemplaba la suelta de caballos semisalvajes que se espera conformen una manada de 20 ejemplares. Otra de las sueltas incluye una especie un tanto menos conocida: el tauro, un animal creado a través de cruces entre distintas subespecies bovinas como las vacas domésticas, que trata de asemejarse a los extintos uros (Bos primigenius primigenius), otra subespecie de la familia ya extinta que habitó la Península Ibérica.
Los buitres son otra de las especies clave en este proceso de restauración, con la reintroducción del buitre negro ya puesta en marcha en la comarca del Alto Tajo. Con la reintroducción de aves carroñeras como el quebrantahuesos se pretende “rellenar huecos” en la cadena trófica de la región. Asimismo, el lince ibérico (Lynx pardinus) es otra de las especies que se quiere recuperar dentro del marco de este proyecto.
Además, las actuaciones abarcan otros aspectos de la recuperación de los ecosistemas, desde la eliminación de un azud en el río Cabrillas, a la recuperación del pastoreo natural, así como la protección de casi 1.000 hectáreas de bosques antiguos.
Otros proyectos en España
A raíz del desastre de Anzalcóllar surgió el que, a día de hoy, es el principal proyecto formal de restauración ecológica en España: el río Guadiamar y el proyecto Corredor Verde.
Además, en los Pirineos han coincidido proyectos independientes como son los de la reintroducción del oso pardo y del buitre negro, la llegada del lobo y el abandono de tierras agrícolas marginales y pastizales que están siendo colonizados por los matorrales y los bosques.
El Proyecto Oxígeno de la Fundación Ona Futura ha demostrado, por su parte, que la actividad de cable-esquí que realiza una empresa en una de las lagunas de Alcúdia (Mallorca) ayuda a oxigenar sus aguas, mejorando su calidad y promoviendo una mayor biodiversidad. “Estamos estudiando la forma de replicar propuestas de este tipo, que favorezcan el rewilding, en otros sitios”, informa Óscar Belmonte, director de la Fundación Ona Futura (puesta en marcha por la cadena Ona Hotels).
Y otros ejemplos de renaturalización en España de los que ya os hemos hablado son la recuperación de las salinas del Parque Natural de la Bahía de Cádiz, y la conservación y restauración de más de 70 hectáreas en el pinar de Sigüenza (Guadalajara).
Otros proyectos de rewilding en el resto del mundo
Además de en Europa, fuera de este continente también hay proyectos de rewilding que merecen ser mencionados.
Uno de ellos, es la ruta salvaje de Mogollon, llevada a cabo por RewildingEarth. El Mogollon es una vasta zona de montañas, ríos y bosques que se extiende de oeste a norte desde el desierto de Gila, en el suroeste de Nuevo México, hasta el Parque Nacional del Gran Cañón, en el norte de Arizona.
También tenemos el proyecto Iberá, el cual debe de ser el proyecto de reintroducción de especies más grande del continente americano.
En Brasil hay algunos proyectos de reintroducción multiespecies, como el Parque Nacional Tijuca, y otros de reintroducción de una especie concreta.
Pero, sin lugar a dudas, África es donde el Rewilding tiene una escala mucho más grande y el mayor impacto de conservación, fomentado por el turismo conservacionista.
Finalmente, con la designación del período 2021-2030 como la “década de restauración de ecosistemas” por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas, y la reciente aprobación de la Ley de restauración de la naturaleza en España, se espera que los responsables de la formulación de políticas y la toma de decisiones impulsen más acciones en este ámbito.
Fuentes: Rewilding Europe, RewildingEarth, Sinc, BBVA, Ecosistemaglobal y Xataka
