La Xunta de Galicia ya ha iniciado el expediente para declarar Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de Paisaje Cultural, a la Ribeira Sacra. Este proceso se prevé que esté finalizado en diciembre de 2018, siendo un paso intermedio para su declaración final como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, el cual es su objetivo. El espacio abarca 17300 hectáreas en 21 municipios de Lugo y Ourense, incluyendo además, dos anillos más amplios con diferentes niveles de protección y obligaciones.
Ribeira Sacra: un tesoro natural con denominación de origen
La Ribeira Sacra es una zona que comprende las riberas de los ríos Cabe, Sil y Miño, en la zona sur de la provincia de Lugo y el norte de la de Orense, en Galicia, España, y que integra un conjunto de 21 ayuntamientos o municipios de dichas provincias.
Se cree que el nombre de Ribeira Sacra proviene del latín “Rivoira Sacrata” de la Edad Media, el cual se refería a la gran cantidad de monasterios y templos localizados en los monumentales cañones y en las escarpadas laderas de la zona. De hecho, actualmente, se pueden visitar 18 monasterios, entre los que destacan el reciente Parador de San Estevo de Ribas de Sil (en Nogueira de Ramuin, Ourense), y el de Monforte de Lemos (mayor parte en el Concello de Pantón, Lugo).
Por otra parte, la Ribeira Sacra es especialmente famosa por sus tesoros naturales y biológicos, constituyendo un vastísimo ecosistema de gran variedad y riqueza. En cuanto a su importante valor paisajístico, destacan el Meandro de A Cubela en Ribas de Sil y los Cañones del Sil.
Además, la Ribeira Sacra ofrece una amplia variedad de experiencias lúdicas y gastronómicas, siendo también conocida como denominación de origen por la buena calidad de sus vinos, a los que se conoce popularmente en la zona como “mencía”, debido a su elaboración, en su mayoría, con esta variedad de uva.
Declaración como BIC de la Ribeira Sacra
El presidente Feijóo calificó la Ribeira Sacra como un “paraje singular de Galicia que merece protección”, por lo que, como dijimos antes, la Xunta inició el expediente para su declaración como BIC, indicando que la Ribeiera Sacra es un “ejemplo excepcional que es necesario proteger, una preservación que se extiende a otros bienes y manifestaciones que complementan su sentido y valor cultural, así como a una zona perimetral”.
Así, el expediente incluye, entre las manifestaciones a proteger, tres elementos del patrimonio inmaterial gallego: las fiestas de “fachas e fachós” de Castro Caldelas, Viledos y Castelo; las fiestas del “Entrodio Ribeirao” de Santiago de Arriba, el “Oso de Salcedo” y “los Felos de Esgos”; y la alfarería tradicional de Gundivós y Niñodaguía.
Además, la declaración engloba los ayuntamientos de A Peroxa, A Pobra de Trives, A Pobra do Brollón, A Teixeira, Carballedo, Castro Caldelas, Chantada, Esgos, Monforte de Lemos, Montederramo, Nogueira de Ramuín, O Saviñao, Pantón, Parada de Sil, Paradela, Portomarín, Quiroga, Ribas de Sil, Taboada y Xunqueira de Espadanedo.
Cabe indicar que el jefe del Ejecutivo, mandó un mensaje de tranquilidad a los operadores económicos de la zona y en especial a los viticultores, ya que su actividad no se va a ver afectada por la normativa que se lleve a cabo, y además, para las áreas perimetrales no serán necesarios informes específicos para intervenciones, salvo en el caso de grandes infraestructuras.
Además, para la publicación de este expediente, se llevaron a cabo 11 reuniones técnicas en las que la Ribeira Sacra prepara su candidatura a Patrimonio de la Humanidad, arrancando su declaración como BIC, en la que participaron todos los ayuntamientos y diputaciones implicadas en el proyecto, las denominaciones de origen vitivinícolas, las empresas hidroeléctricas y los agentes y asociaciones interesados en la declaración.
En concreto, el tratamiento se divide entre BIC ya declarados con anterioridad, nuevos contornos de BIC también ya declarados, el propio BIC de Paisaje Cultural y la zona perimetral.
Tras el proceso de exposición pública, que durará tres meses, se remitirá el documento a los órganos consultivos para que emitan su informe. Los últimos pasos serán la elaboración de un informe técnico de la propia Dirección Xeral y la declaración como BIC por decreto de la Xunta.
El conselleiro Román Rodríguez, ha destacado la relevancia del proceso iniciado para conseguir la futura declaración de la Ribeira Sacra como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, “una decisión que atraería más turismo, añadiría valor a la producción vitivinícola y fomentaría la creación de empleo en un área que pasa por dificultades».
Fuentes: La Voz de Galicia y Europa Press